La acción de cepillarse los dientes la tenemos tan automatizada que no nos paramos en pensar si realmente lo estamos haciendo bien.
En la mayoría de las ocasiones, después de visitar al dentista es cuando nos hacen ver que no lo hacemos bien y que tenemos que reajustar la rutina.
¿Cuál es la forma correcta de cepillarse los dientes?
La mayoría de las personas no se cepillan los dientes de una forma correcta. Sobre todo los niños se cepillan los dientes delanteros.
Algunas pautas para un correctos cepillados son:
- Colocar el cepillo de forma horizontal repesto de la encía en un ángulo de 45º. El objetivo es llegar al «surco» de la encía, que es dónde se acumula más sarro.
- Realizar movimiento horizontales, presionando suavemente sobre la línea de la encía para arrastrar la suciedad. Esto hay que hacerlo con todos los dientes.
- En la zona trasera de los dientes delanteros hay que colocar el cepillo verticalmente y hacer movimientos circulares, siempre llegando hasta la encía.
- Por último, hacer uso de hilo dental para llegar las huecos interdentales.
- La lengua es importante limpiarla también. Para ello, lo más recomendable es utilizar un raspador lingual.
Consejos para cepillarse los dientes
- Lo ideal es cepillarse los dientes después de cada comida, pero como esto en ocasiones no es posible, como mínimo deberíamos cepillarnos los dientes después de comer y antes de ir a dormir.
- Es recomendable esperar unos 20 minutos depués de comer, ya que al comer se desequilibra el pH natural de la boca y lo ácidos pueden atacar el esmalte.
- Importante cepillarse las encías con suavidad. Si sangran puede ser un signo de gingivitis por la acumulación de sarro.
Cómo cepillarse los dientes con cepillo eléctrico
El cepillo eléctrico ejerce una presión controlada y por tanto sólo se debe deslizar por los dientes.
- Primero cepillar las caras exteriores siguiendo la línea de las encías, manteniendo unos segudos en cada diente e inclinándolo para acceder a los huecos interdentales.
- Después cepillar la parte interna, prestando atención a los incisivos centrales inferiores ya que ahí suele acumularse bastante placa.
- Se recomiendo, por lo menos, dos minutos de cepillado cubriendo cada área de la boca.
Cómo cepillarse los dientes con brackets
Los brackets pueden dificultar un poco la higiene oral y, de hecho, son un nicho perfecto para restos de comida y placa bacteriana.
Se recomiendo utilizar cepillos de cerdas suaves y cabezal pequeño, los cepillos interdentales y el hilo dental.
las personas con brackets deben lavarse los dientes después de cada comida. En cuanto al tiempo del cepillado con brackets, suele oscilar entre 5-10 minutos.
Los pasos para una correcta higiende dental en persona con brackets son:
- Comienzar por los dientes de la parte superior.
- Cepillar la superficie por donde mordemos, donde más fácilmente pueden acumularse los restos).
- Continúa cepillando por encima de los brackets, con movimientos suaves.
- Cepilla también por debajo del bracket, para evitar que quede placa acumulada por detrás del alambre.
- No te olvides de los surcos de las encías y de los huecos interdentales.
- Después toca la parte interna de los dientes.
- Repetir estos pasos con la parte inferior.
- Y por último, cepilla suavemente las encías y la lengua.
¿Qué tipo de cepillo dental debo utilizar?
Un cepillo de cerdas suaves es ideal para eliminar la placa y los restos alimenticios de los dientes. Los cepillos de cabeza pequeña también son recomendables, llegan mejor a todas las zonas de la boca, aún a los dientes posteriores de difícil acceso.
Para muchos, un cepillo dental eléctrico es una buena alternativa, ya que hace un mejor trabajo de limpieza de los dientes. Especialmente en aquellas personas que tienen dificultades para cepillarse o destreza manual limitada.
10 errores al cepillar los dientes
1. Cepillar muy fuerte
Al contrario de los que se piensa, no se limpia mejor por apretar más, todo lo contrario puede dañar el diente y la encía.
2. Cepillar muy rápido
Lo recomendable es cepillarse los dientes durante 2 minutos repartiendo dicho tiempo entre todas las áreas de la boca, lo normal que se emplea son 30 o 40 segundos.
3. Usar un cepillo en mal estado
Si el cepillo está muy desgastado, se pierde el redondeado final de las cerdas y, además, éstas se abren. Esto hace que el cepillado sea menos eficaz e incluso que pueda dañar dientes y/o encías. Lo recomendable es cambiar el cepillo dental cada 3 a 4 meses.
4. Usar cepillos con cerdas duras
Los cepillos con cerdas duras desgastan dientes y encías, y peor aún si se ejerce una fuerza excesiva durante el cepillado. Por lo general, se recomienda cepillos de dureza media, y suaves en caso especiales (encías finas, casos de hipersensibilidad dental o gingival, presencia de recesiones o raíces expuestas …)
5. Usar cepillos con cabezales grandes
Los cepillos con cabezal pequeño facilita el acceso a las zonas posteriores y son muy útiles para cepillar la cara interna de molares inferiores en casos de náuseas durante el cepillado.
6. Poner demasiada pasta en el cepillo
La cantidad empleada ideal podría ser el equivalente a un grano de arroz en los más pequeños al de un garbanzo en adultos.
7. Realizar una técnica de cepillado incorrecta
Aunque no hay una técnica ideal para todos porque depende de edad, tipo de encías, …, las técnicas de barrido vertical (del rojo al blanco, es decir, de la encía al diente) son muy efectivas, fáciles de realizar y no son lesivas.
8. Cepillarse inmediatamente tras la comida
Y más cuando se han consumido alimentos o bebidas ácidas, pues incrementaría la sensación de sensibilidad dental. En estos casos, es recomendable esperar unos 20 o 30 minutos para el cepillado, con el fin de dejar a la saliva que realice su efecto tampón.
9. Olvidarse de cepillar la lengua
En la superficie de la lengua y entre las papilas también quedan restos de alimentos, bacterias y productos de su metabolismo. Además, en un porcentaje muy alto de los casos, no limpiarse la lengua es la primera causa de halitosis o mal aliento.
10. Pensar que solo con el cepillado “basta”
Es imprescindible acompañar el cepillado dental con el uso de algún método de limpieza entre dientes, ya sea con los cepillos interdentales (si hay espacios abiertos) o el hilo dental (si los espacios están cerrados).