Disfruta el verano sin poner en riesgo la salud de tu boca.
En verano se suelen relajar los hábitos saludables que se mantienen durante todo el año, incluido la higiene bucodental.
A continuación detallamos una serie de consejos para evitar problemas como inflamación de las encías, abscesos en las encías y otros trastornos bucodentales, pudiendo disfrutar de las vacaciones sin que se resientan los dientes y encías.
Consejos dentales para el verano
- Cepillado de dientes después de desayunar y antes de dormir. En ocasiones la comida de medio día la hacemos fuera de casa y es complicado cepillarse los dientes, pero como mínimo se debe hacer por la mañana y por la noche. Si no es posible cepillarse los dientes, se puede masticar un chicle sin azúcar con xilitol durante 20 minutos, ya que produce saliva y ayuda a la limpieza (pero esto no sustituye una correcta limpieza).
- El uso de cepillado, colutorios y raspadores linguales evitarán el mal aliento al ingerir bebidas alcohólicas o fumar más de la cuenta. La hidratación es también importante para el mal aliento ya que aumenta el flujo de saliva y la mucosa estará hidratada.
- En verano se incrementa el consumo de helados y bebidas frías. El PH ácido de los mismos y un cepillado fuerte acaban afectando a nuestros dientes, pudiendo quedarse al descubierto la dentina y produciendo sensibilidad dental.
- En las actividades al aire libre se pueden producir golpes en los dientes. En caso de un golpe en los dientes hay que comprobar su movilidad, si se ha fracturado recoger el trozo desprendido y acudir al dentista.
- Aprovechar frutas y verduras de verano que aportan nutrientes y antioxidantes para mejorar la protección de las encías.
- Si se utilizan férulas de descarga para el bruxismo o de ortodoncia, se deben seguir usando las horas que haya recomendado el dentista.
- Proteger los labios del sol con un fotoprotector adecuado.
Buceo y salud dental
El verano es ideal para practicar o iniciarse en el buceo, pero hay que conocer las posibles consecuencias de esta actividad en nuestros dientes.
Los cambios de presión a los que se somete al cuerpo cuando se está bajo el agua implican algunos riesgos. Y cuando se padecen problemas, como gingivitis, periodontitis o caries, el riesgo es mucho mayor.
Los problemas dentales al realizar buceo son:
Barodontalgia
Bajo el agua, la presión es mayor y en ocasiones, la pulpa del diente no es capaz de equilibrar esa presión y aparece un dolor que puede ser muy intenso. También cabe la posibilidad de que haya pequeñas burbujas de aire en caries no tratadas o incluso bajo un empaste. Estas, al aumentar la presión, se expanden, provocando también un dolor agudo. Estos cambios de presión también suelen provocar problemas bucales en pilotos o montañeros.
Odontocrexis
Al ascender se expande el aire que pueda existir entre empastes o coronas y puede llegar a provocar en casos extremos rotura del diente.
Barotrauma sinusal
En este caso, el problema es una mala ventilación de los senos maxilares, que, con el cambio de presión, deriva en dolor de cabeza o de muelas e incluso sangrados. Se suele producir en la inmersión y aliviarse según se asciende a la superficie.
Otros problemas
Pequeños traumatismos o dolor mandibular provocados por la fuerza con la que se sujetan las boquillas del regulador.
Consejos antes de realizar buceo
- Evita sumergirte si te has sometido muy recientemente a la extracción de alguna muela del maxilar superior.
- Evita bucear si sufres congestión nasal.
- No te sumerjas con prótesis removibles.
- Ante cualquier molestia, asciende a la superficie cuanto antes. En ocasiones el dolor puede ser tan intenso que te puede desorientar y ponerte en un riesgo innecesario.
Dolor dental y vuelos en avión
Al igual que ocurre con el buceo, en los vuelos en avión también se producen cambios de presión.
Algunos problemas que se puede dar al coger un vuelo son:
Barodontalgia
Durante el despegue y el aterrizaje pueden aparecer cambios de presión en las cavidades que existan en los dientes: bien por presencia de caries o bien por existencia de empastes defectuosos. La pulpa del diente puede verse afectada por estos cambios de presión originando un dolor dental llamado barodontalgia.
Odontocrexis
También se conoce como explosión barométrica de los dientes y se produce cuando ha quedado aire en dientes que has sido tratados hace poco tiempos con coronas, resinas o implantes.
Consejos dentales antes de volar
A continuación mencionamos algunos consejos para prevenir la aparición de los problemas anteriores:
- Si estas resfriado es mejor posponer el vuelo, aunque los descongestionantes puede ayudar (siempre consultar con el médico).
- Para aliviar la presión durante el despegue y aterrizaje mastica chicle sin azúcar o chupa un caramelo, en el caso de los bebés la mejor opción es amamantarlos para variar la presión de forma controlada.
- El uso de tapones de oído filtrados podría ayudar a igualar lentamente la presión de aire contra el propio tímpano.
- La respiración profunda en el momento del ascenso es útil para prevenir barotraumas.
- No hagas caso omiso de molestias o dolor dental antes de subir a un avión.
- Visita al dentista si hay que restaurar algún defecto en coronas, resinas o caries.
- Esparar 24 horas después de cualquier cirugía dental antes de coger un vuelo.
Evitar tomar bebidas calientes o azucaradas durante el vuelo.